Si en lugar de las actuales circunscripciones electorales provinciales, que datan del siglo XIX, y la ley D´Hondt, que premia a los dos partidos más votados, en España tuviéramos una Ley Electoral basada en una circunscripción única y un sistema proporcional, los 350 escaños del Congreso se repartirían de un modo bien distinto como puede verse en este gráfico y, sobre todo, todos los votos valdrían igual, tanto si vinieran de A Coruña como de Teruel.
Porque con la ley D´Hondt el partido de Rosa Díez, UPyD, ha necesitado 227.000 votos de media para conseguir un solo diputado mientras que, en el otro extremo, Geroa Bai lo ha obtenido con sólo 42.000 ¿Dónde está la igualdad ante la ley? Y también se ve con claridad por qué ni PP, ni PSOE, ni CiU quieren cambiar la Ley Electoral: les ha bastado con una media de 58.000 votos en el caso del PP y de 63.000, en los de CiU y PSOE, para lograr un escaño.
Infografía: lainformacion.com
Entradas relacionadas
- El 20N ellos se examinan y nosotros calificamos
- La coalición PP-PSOE nos hace un corte de mangas a los españoles
- Diez vicios que asfixian a la democracia española
- Por qué la asamblea en Sol
- Jiménez de Parga: Es imperioso cambiar la Ley Electoral
Socied@d Reticular 
Esto si sería un resultado justo, sin distorsiones. El PP no hubiera conseguido mayoría absoluta, habría dos partidos minoritarios con voz y presencia en toda la península (IU y UPyD), y otros dos y dos representando a Cataluña y País vasco (CiU, ERC y Amaiur, PNV). Todo esto con la lógica de los votos de los ciudadanos y no con alteraciones indignantes como que CiU sea la tercera fuerza política en la cámara o que UPyD siendo el 4º partido más votado del país se quede incluso sin grupo parlamentario propio.
Me gustaMe gusta